De entrada 280
Estrella Burgos
La sangre de color verde es común en los extraterrestres que ha imaginado la ciencia ficción. Uno es nada menos que el lacónico Dr. Spock, de la serie televisiva Star Trek, nativo del planeta Vulcano. Otros son monstruos, como los de la saga fílmica Alien. Aquí en la Tierra son muy raras las criaturas de sangre verde, pero definitivamente existen. Mucho más comunes son los organismos de sangre azul, ninguno aristócrata, por cierto. Y hay otros colores de la sangre. ¿A qué obedece su existencia? Todo esto lo explican Juan Carlos González Morales y Jimena Rivera Rea en el artículo de portada.
Los pigmentos de la sangre, del color que sea, sirven para transportar oxígeno. Sin ellos no habría respiración. Y el oxígeno es uno de los seis elementos químicos que constituyen las formas de vida terrestres; cada uno de ellos tiene una historia biológica que da cuenta de su importancia para la vida, como narra en su artículo Guillermo Murray Tortarolo.
Daniel Martín Reina escribe la asombrosa historia del palimpsesto de Arquímedes, un libro de oraciones hecho de pergamino que ocultaba varias obras de este sabio griego. De su valor para la ciencia y de cómo se rescataron Daniel nos da todos los detalles en una historia detectivesca.
En la sección “¿Será?” Luis Javier Plata aborda el espinoso asunto de qué tan bien o mal dormimos cuando lo hacemos acompañados. Y en “Falacias” Javier Bourges nos advierte de las consecuencias de confundir correlación con causación, algo que hacemos con gran frecuencia. Por ejemplo, ¿sería correcto concluir que la sangre verde del Dr. Spock es la causa de su total falta de empatía, o es al revés, o...?
Este mes damos la bienvenida a la primavera, ojalá que también al inicio del fin de la pandemia. Seguiremos informando.