Retos 101

Cuentas alegres

Antonio Ortiz

Ilustraciones: Carlos Durand

Los optimistas

Para celebrar que habían aprobado el examen de ingreso a la Universidad, Rubén, Carlos y Sergio decidieron irse a Puerto Escondido. Llegaron en la tarde y se fueron directamente a la playa donde conocieron a 3 chicas universitarias; quedaron con ellas en verse más tarde en una discoteca.

Por la noche los 3 amigos se dirigieron a la discoteca, suspirando por las chicas, y soñando con romance. Al pasar frente a una farmacia, Carlos sugirió que compraran unos condones. La dependienta de la farmacia les dijo que tenía gran surtido de condones: de colores, de sabores, lubricados, sensitivos, con textura, y un modelo nuevo hecho de látex súper reforzado, pero extremadamente sensitivo, que venía en paquetes de 3 y costaba $250. Los amigos optaron por éstos; sacaron sus carteras y cada uno puso sobre el mostrador un billete de $100. La dependienta tomó los 3 billetes y puso el cambio en monedas de a $10 sobre el mostrador junto con el paquete de condones. Carlos abrió el paquete, le dio 2 a sus amigos, y se guardó el suyo. Luego tomó 3 de las 5 monedas, le dio 2 a sus amigos y se guardó una. Con las 2 monedas que quedaban compraron unas pastillas refrescantes del aliento, que costaban 20 pesos.

Una vez equipados los amigos se encaminaron a la discoteca en cuya entrada vendían ramos de flores a $10. Rubén las miró y dijo: “Con los $10 que nos quedan del cambio de la farmacia podemos comprar unas flores, ¿no?”. Carlos dijo que no quedaba cambio, sin embargo, Rubén insistió: “Todos pusimos $100, Carlos nos regresó $10, por lo que cada uno puso $90, que entre todos serían $270; luego están los $20 de las pastillas y entonces en total le dimos $290 a la dependienta así que nos faltan $10”. Fue entonces que dijo Sergio: “Allí están nuestras amigas, olvídense de los $10 y vamos con ellas”.

¿Quién se quedó con los $10 que mencionaba Rubén?

Doble protección

Mario, que siempre buscaba la forma de pagar menos, entró un día a la farmacia y pidió el condón más barato, que resultó ser uno en promoción, a tan sólo $8 e incluía un estuche portacondones de plástico. Mario preguntó cuánto le descontarían si se llevaba únicamente el condón. El encargado de la farmacia le respondió: “El estuche es por tu seguridad, porque si llevas el sobre del condón en las bolsas del pantalón, junto con las llaves y las monedas, es muy probable que el condón se rasgue y luego ya no cumpla con su función”. Sin embargo, Mario insistió en que sólo quería el condón. El encargado, ya un poco harto, lo retó a que si adivinaba cuánto costaría el condón solo, partiendo de que el estuche costaba $2 menos que el condón, le regalaría el paquete de promoción, y que si se equivocaba pagaría los $8 y dejaría de dar lata. Mario aceptó, sacó mentalmente las cuentas, y dijo: “El condón cuesta $6 y el estuche $2.” El encargado le contestó que no y Mario le tuvo que pagar $8.

¿Cual sería la respuesta correcta?

Un mundo feliz

El día que inauguraron la condonería Un mundo feliz, entraron juntas María, Pamela, Hortensia, Josefina, Guadalupe y Rosa a comprar paquetes de condones surtidos. Dada la amabilidad del dueño ellas acordaron comprar siempre sus condones ahí. Como todas estas amigas tenían una relación estable con sus respectivas parejas, a María el paquete de condones surtidos le solía durar 9 días, a Pamela 10 días, a Hortensia 12, a Josefina 15, a Guadalupe 18 y a Rosa 20.

¿Cuántos días después de la inauguración habrán coincidido todas estas amigas en la condonería a la vez?