Retos 165

Chuck Norris no lleva sandalias

Antonio Ortiz

Entre cero

Chuck Norris es un actor estadounidense especialista en artes marciales que ha hecho un sinfín de películas. Quién sabe por qué o cómo, pero el hecho es que de unos años para acá, Norris se ha convertido en todo un ícono de la fuerza bruta y hay cientos de páginas en Internet dedicadas a dar cuenta de sus hazañas. Y bueno, estaba un día Chuck caminando por el Paseo de la Reforma de la Ciudad de México, cuando de repente oyó la voz de un niño que le decía: “¿Le boleo sus zapatos?”. Chuck se miró las botas, miró al niño y decidió que era una buena idea. Mientras el niño le boleaba las botas, Norris le dijo: “¿Sabías que soy el único hombre que ha podido contar hasta el infinito 2 veces?” El niño sólo alzó la cabeza y preguntó a su vez: “¿En serio?”. Entonces Chuck respondió: “Sí claro. También se cuentan de mí cosas como que he estado en Marte y por eso no hay signos de vida; que puedo oír el silencio, y que soy el único ser humano capaz de hacer una división entre cero”.

Aunque el niño bolero creía absolutamente todo lo que Chuck le decía, tanto que se le podía considerar todo un Chucksito Norrisito, también intentó presumir diciéndole: “Pues yo también soy tan increíblemente increíble que ayer cuando me desperté tenía 9 años y, aún así, el año que entra ¡cumpliré 11 años!”

¿Qué día del año cumplía años Chucksito y qué día del año era ése en el que boleaba las botas de Norris?

Iniciado

Luego de su encuentro con Chuck, el niño bolero se hizo famoso, más todavía que el propio Norris al grado que se decía que, por ejemplo, cuando subía a un elevador, Chucksito Norrisito no necesita oprimir ningún botón, porque más le valía al elevador saber a qué piso quería ir si no quería terminar destrozado en unos cuantos segundos por las patadas voladoras de Chucksito, o que para descontarse a un policía que lo quería detener por ejercer comercio ambulante en la vía pública con su banquito y cajón de bolero, no necesitaba darle golpe alguno sino que con un tosido le bastaba para dejarlo con la nariz y varias costillas rotas. Pero además de sus hazañas con la fuerza bruta, también eran famosas su hazañas mentales, como aquélla en la que un diputado que solía presumir que rifaba casas y becas entre los niños de la calle pasó junto con la nube de periodistas que siempre lo acompañaba al lado del puestecito de boleo de zapatos de Chucksito y en un nuevo acto de presunción le dijo al niño y a la prensa: “A ver niño, aquí en esta bolsa de plástico negro hay 3 canicas, 2 negras y 1 blanca, si metes la mano y sacas una canica blanca, te voy a a dar una casa amueblada y una beca para que estudies la carrera que quieras en el país que quieras, y si sacas una negra te enviaré a la correccional hasta que cumplas la mayoría de edad”.

El Chucksito de inmediato aceptó, sobre todo porque el día anterior un chofer de taxi le había dicho que ese diputado era muy tramposo porque en la bolsa de las canicas siempre traía 3 canicas negras y ni una blanca.

¿Qué acción absolutamente lógica hizo aquella mañana Chucksito, para que el diputado no tuviera más remedio que darle una casa amueblada y una beca para estudiar?

Surtidor

En cuanto Chucksito se mudó a su nueva casa, llamó a Norris a Estados Unidos para que viniera a visitarlo. Como no había vuelos a México ese día, Norris rompió las puertas del aeropuerto, forzó la de un jet y lo encendió, pero al darse cuenta de que no tenía gasolina, conectó las mangueras de 3 surtidores directamente al tanque de gasolina del avión. Si el primer surtidor proporcionaba gasolina a tal velocidad que el tanque del avión se llenaba en 20 minutos, el segundo surtidor lo llenaba en 40 minutos y el tercer surtidor en una hora y 20 minutos, en ¿cuánto tiempo logró Norris que se llenara el tanque de gasolina de la avioneta?

Por cierto, a los 12 minutos cayó un aerolito en el aeropuerto donde estaba Chuck, ¿habrá logrado salir antes de que cayera el aerolito?